Justicia identifica a responsables del asesinato de Víctor Jara a 39 años de su muerte

(CIPERCHILE)

A Víctor Jara lo mataron con 44 impactos de bala. Eso se sabía desde hace algún tiempo. En mayo de 2009, CIPER publicó una extensa y desgarradora investigación con los relatos de quiénes y cómo acabaron con Jara. Aún así, lo que aún no estaba claro –al menos judicialmente– era quiénes hicieron los disparos. Pero esta tarde, la Corte de Apelaciones de Santiago emitió un auto de procesamiento que resultaría clave para responder la interrogante que ha penado por 39 años: ¿quiénes asesinaron a Víctor Jara?

A través del documento, el tribunal procesó a ocho ex militares que estarían involucrados en el brutal homicidio del cantautor popular el 16 de septiembre de 1973 en el entonces Estadio Chile, hoy Estadio Víctor Jara.

El ministro en visita Miguel Vázquez Plaza anunció el procesamiento de dos ex militares como autores del delito de homicidio calificado: el teniente (r) Pedro Barrientos Núñez y el coronel (r) Hugo Sánchez Marmonti. Como Barrientos reside desde 1990 en Estados Unidos, el magistrado despachó una orden de captura internacional en su contra.

El 16 de mayo pasado, el programa En la Mira de Chilevisión dio inicio a su temporada 2012 con la investigación titulada “ Quién mató a Víctor Jara”. El equipo de investigación periodística viajó a Estados Unidos y entrevistó a Barrientos:

-Realmente eso no es cierto. Nunca he estado en el Estadio Chile, no conozco el Estadio Chile y no sabía lo que era el cantante Jara (…) No tengo que enfrentar a la justicia porque yo no he matado a nadie –dijo el principal inculpado del asesinato.

En todo caso, Barrientos y Sánchez no habrían sido los únicos miembros de la Fuerzas Armadas que participaron en el homicidio. De acuerdo a la investigación judicial, junto a ellos también estarían involucrados Roberto Souper Onfray, Raúl Jofré González, Edwin Dimter Bianchi, Nelson Hasse Mazzei, Luis Bethke Wulf y Jorge Eduardo Smith Gumucio, todos ellos procesados como presuntos cómplices del asesinato (Smith fue agregado a la lista tras una corrección de la resolución original).

Con el documento que difundió hoy la Corte de Apelaciones, se dictó también una orden de aprehensión contra los ocho ex uniformados. Una orden que quedó a cargo de la Brigada Investigadora de Delitos contra los Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones. Una vez detenidos, los presuntos responsables de la muerte de Víctor Jara, quedarán bajo custodia del Batallón de Policía Militar Nº1 del Ejército.

En declaraciones a Radio BioBio, el abogado de la familia de Víctor Jara, Nelson Caucoto, calificó la resolución judicial como “un duro golpe a la impunidad en materia de derechos humanos y a funcionarios del Ejército, puesto que el crimen de Víctor Jara tiene una resonancia a nivel mundial, no sólo nacional”. También destacó la labor de continuidad en el proceso judicial que encabezó el ministro Vázquez .

-Esto es producto exclusivo de los ministros que han llevado a cabo la investigación. Estos procesamientos no son consecuencia de un aporte sustancial de la institución del Ejército de Chile al esclarecimiento del crimen de Víctor Jara. El Ejército no ha colaborado absolutamente en nada en cuanto a la identificación de los autores de este grave crimen –agregó Caucoto.

La resolución judicial además esclarece las circunstancias de la muerte de Víctor Jara. Según el documento, tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, la entonces Universidad Técnica del Estado (UTE, hoy USACH), fue sitiada por efectivos del Regimiento Arica del Ejército de Chile. El 12 de septiembre, tropas militares ocuparon las dependencias universitarias. Detuvieron a estudiantes, profesores y personal administrativo. Los detenidos –entre los que se encontraba el cantante popular y también investigador universitario– fueron llevados en buses de locomoción colectiva al ex Estadio Chile (hoy Estadio Víctor Jara). Según el texto, Jara fue separado del resto de los prisioneros tras ser reconocido por el personal militar.

Entre los días 13 y 16 de septiembre fue parte del proceso de interrogatorios a algunos detenidos. Ese último día fue ejecutado. Según el informe de autopsia, su muerte se produjo por al menos 44 impactos de bala. Su cadáver fue encontrado días después por pobladores en un terreno baldío cerca del cementerio Metropolitano.